ni mal sonantes, ni rimbombantes.
Sí las palabras sencillas
nacidas de corazon ligero
no asfixiantes ni endulzantes
ni mentirosas,
con sentimiento escondido...
leves, como las que aprendi de niño
que fluyen como fugaces
con reflejo sobre agua...
verdes, cual paisaje de infancia
azules de tus océanos
mansas como el puro sueño,
sedantes como nana de madre
hermosas recien nacidas
que se escurren entre los labios
de quien las cuenta...
se deslizan tranquilas en oidos ajenos
que circulan por tus neuronas
entre susurros amantes...
que viajan padres a hijos.
No me van los verbos polares
esos que no traen sentimientos
sino hielo cuando las nombras
o te dejan petreo o indiferente,
por pretenciosas
que laminan los corazones
con sus lenguas afiladas,
nombrándolos con su nombre de pila.
19-4-06Palabra,laina,escondetras.